Cómo saber si tienes una buena salud financiera

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¿Qué tan común es para ti analizar tus finanzas personales? Esto va mucho más allá de saber si te alcanza para llegar a fin de mes, tiene que ver con un diagnóstico general. Hacerlo te puede ayudar a que lleves una mejor relación con lo que ganas, lo que gastas y lo que ahorras. Tener una buena salud financiera te permite también enfrentar con más armonía un imprevisto económico y a mejorar tu calidad de vida a partir de tus metas y cómo alcanzarlas a mediano y largo plazo.

Así como existen indicadores para evaluar la salud de una persona, sucede lo mismo con lo financiero, gracias a ciertos parámetros es posible hacer un análisis sobre la situación de una persona con relación a su economía. Hoy te contamos sobre estos indicadores y cómo poner en marcha diferentes tratamientos que te permitirán un mayor bienestar financiero.

¿Qué aspectos debes evaluar para determinar la salud de tus finanzas?

Para saber cómo está tu salud financiera es necesario que te bases en cuatro indicadores muy importantes. Con esto en mente puedes detectar dónde están tus puntos fuertes y los que debes trabajar para mejorar. Es como un coche: sabes que hay ciertas cosas básicas que debes cubrir y que te dirán en qué condiciones está, y para qué situaciones es óptimo y para cuáles no cumple con los requisitos.

  1. Capacidad para administrar tus ingresos y gastos: Es indispensable que tengas suficiente dinero para ahorrar. Para esto será necesario que hagas un análisis detallado de tus gastos mes con mes en el último año y que lo contrastes con tus ingresos mensuales.Si notas que te queda poco dinero al hacer esta resta, sobre todo si encuentras gastos que no son indispensables y puedes evitar, esto será lo primero que necesitas corregir.
  1. Liquidez para pagar facturas y enfrentar imprevistos: Es necesario que puedas pagar todas tus facturas a tiempo y por completo. Para esto, deberás identificar qué clase de facturas estás pagando.Las de prioridad alta siempre serán aquellas que no son opcionales de atender en tiempo y forma, como lo puede ser la hipoteca de una casa, mientras que las de prioridad secundaria son aquellas que no te representarán mucho desequilibrio en caso de que no puedas pagarlas en su totalidad y fechas ideales, como la mensualidad de una tienda departamental o una colegiatura.También es importante que detectes cuál es tu capacidad para ahorrar, ya que tener la posibilidad de enfrentar imprevistos económicos es otro aspecto fundamental. Si en estos momentos aún no tienes un fondo para emergencias y otro para ahorro te recomendamos que inicies en esto lo más pronto posible.
  2. Nivel de endeudamiento: Aquí debes tomar en cuenta qué es lo que estás pagando mes a mes. Hay deudas que no necesariamente pueden implicar una alerta roja, pero existen otras que crecen exponencialmente una vez que fallas en fechas de pago y la cantidad mínima para no generar intereses, como un préstamo con un nivel alto de interés.Si se te está yendo mucho dinero en hacer estos pagos y estás dejando de lado otras necesidades básicas es importante que atiendas este problema para que no siga creciendo.
  3. Planificación a largo plazo: Mirar hacia tu futuro es parte clave para determinar qué tan saludable estás a nivel financiero. Las personas que mejor estado tienen en este aspecto suelen ser aquellas que no solo se preocupan por pagar sus deudas a tiempo y controlar sus gastos.Cuando además de planificar, te organizas para alcanzar tus metas, buscas la manera de crecer tu dinero e inviertes constantemente lo que estás haciendo es preparar el terreno para que cuando lleguen tus años dorados puedas descansar y disfrutar tu retiro sin que dinero sea una preocupación para ti.

¿Cómo atender tu salud financiera desde ahora?

Una vez que hayas evaluado tu situación en cada uno de los indicadores será hora de echar manos a la obra para mejorar tu salud financiera y atender cada aspecto, en caso de que notes que estás muy ajustado y que tu estado económico, según estos indicadores, no sea el óptimo. Aquí te dejamos algunos consejos prácticos:

  • Usa tu dinero con inteligencia: Corta en la medida de lo posible todos los gastos hormiga que puedes eliminar sin problema. Esto también incluye controlar mejor las compras impulsivas. Haz un presupuesto que contemple tus gastos prioritarios y descarta todo aquello que no sea necesario. De esta manera podrás destinar ese dinero a liquidar deudas y ahorrar.
  • Prioriza el ahorro como hábito: Ahorrar no solo te ayudará a enfrentar imprevistos económicos, también te dará la tranquilidad de poder solucionar un problema para que te afecte menos dentro las posibilidades.
  • Invierte en tu futuro: Busca maneras de ahorrar y que tu dinero crezca con el tiempo. Una excelente manera es ahorrar en tu Afore, ya que tu ahorro estará en un lugar seguro y los rendimientos que generes aumentarán tu capital para cuando llegue tu retiro. Recuerda que entre más Aportaciones Voluntarias hagas será más factible que tu dinero aumente cada vez más. Aquí te contamos más sobre cómo funciona esto.
  • Ten un buen historial crediticio: Cada vez que pagas en tiempo y forma tus deudas abonas puntos en un historial al que acceden bancos y otras instituciones a la hora de que solicitas un crédito. Entre mejor sea tu perfil tendrás más oportunidades de acceder a mejores ofertas. Como nota, recuerda usar tus tarjetas de crédito con responsabilidad y solo hacer compras que estés seguro puedes pagar sin problemas.

Te recomendamos que hagas tu evaluación financiera cada tanto tiempo y le des seguimiento para que te asegures de que estás logrando tus metas y que tu situación va mejorando. Al darle la necesaria atención a cada aspecto podrás mejorar tu bienestar y con el tiempo podrás usar tu economía a tu favor.

Recuerda que este proceso es paso a paso, así que no te desesperes. Confía en tu planificación, organízate y ten disciplina. Los grandes sueños requieren de esfuerzos que verán sus frutos no de inmediato, pero que te llenarán de tranquilidad una vez coseches lo sembrado: ten por seguro que Tu Yo del futuro® te lo agradecerá.

En Profuturo nuestro objetivo es apoyarte para que dispongas de mejores soluciones que te garanticen un mejor balance financiero y que cuentes con una mejor pensión para tu retiro, tu futuro y el de las personas que amas. Conoce nuestros productos y servicios que ofrecemos: con nosotros ahorrar es fácil y sin complicaciones. También puedes escribirnos en nuestras redes sociales de Facebook, Instagram, TikTok, X (Twitter) o LinkedIn.

Si aún no eres parte de Profuturo, puedes dejar tus datos aquí para que conozcas nuestros servicios y estés más cerca de construir un mejor futuro para ti y tus seres queridos.

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Cómo la generación Z puede usar la Regla del 50/30/20 a su favor

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Es común escuchar historias de los abuelos sobre cómo trabajaban y gestionaban su dinero en su juventud. Aunque muchas cosas han cambiado desde entonces, es importante notar que antes no existía una cultura de ahorro y educación financiera tan desarrollada como la que se promueve actualmente. 

Por razones sociales, culturales y económicas, los retos de las nuevas generaciones son diferentes a los de la generación Baby Boomer y las anteriores. Mientras que para la generación de los abuelos era una prioridad emplearse desde jóvenes, las nuevas generaciones muestran diversas formas de trabajar y gestionar su vida, lo cual también se refleja en sus hábitos financieros. 

A pesar de estos cambios, es fundamental que las nuevas generaciones no pierdan de vista el tema del ahorro y la educación financiera, ya que esto siempre tiene un impacto tarde o temprano y contribuye a la estabilidad económica a diferentes niveles. 

Consideramos que hay ciertos métodos básicos que pueden ser útiles para alcanzar un bienestar financiero, como la Regla del 50/30/20; una excelente opción para iniciar en esto y encontrar una forma inteligente y práctica de administrar tu dinero sin descuidar necesidades básicas, tu futuro, ni los momentos de esparcimiento. 

Prioriza siempre tus necesidades básicas 

La regla del 50/30/20 es una manera de administrarse que se basa en algo muy sencillo: el 50% de tu dinero se destinará a gastos básicos y necesarios, el otro 30% será para gastos personales y el 20% se irá en un fondo de ahorro.  

En este caso siempre darás prioridad a lo más básico y urgente: vivienda, transporte, alimentación, servicios y educación. Así que antes de hacer gastos impulsivos recuérdate siempre tener separado el dinero para estas cuestiones, de tal forma que lo respetes y no lo uses para otras finalidades. 

Toma en cuenta tus gastos personales 

Del 50% que quedó después de usar la otra mitad para cubrir tus necesidades básicas, tomarás un 30% para tus gastos personales. Desde idas al cine, conciertos, salidas a comer, reuniones con amigos, etc.  

Una buena idea para que puedas aprovechar este 30% al máximo es buscar alternativas que hay en tu ciudad y que son gratuitas: aprovecha para buscar en la cartelera cultural donde vives, seguramente encontrarás cosas interesantes para tu recreación o esparcimiento. Picnics y reuniones en casa son otra manera de crear experiencias memorables donde puedas tener un mayor control de tus gastos. 

De esta manera, no solo estarás cuidando de tu bolsillo: también estarás expandiendo el cómo usas tu tiempo y cómo puedes disfrutar de él sin que sientas que debes gastar todo el tiempo.  

No te olvides de ahorrar 

El 20% restante es para crear un fondo de ahorro que te servirá en cualquier emergencia o situación imprevista. Muchas personas no tienen acostumbrado ahorrar porque consideran que no ganan lo suficiente para hacerlo. Sin embargo, jamás habrá un momento “adecuado” para ahorrar: no importa con cuánto empieces, sino que te permitas pensar para Tu Yo del Futuro® y ayudarte por adelantado a que no la pases tan mal en caso de un imprevisto que podría mejorarse con una cantidad de dinero extra.  

Iniciar es más fácil de lo que parece: comienza a hacer cuentas para que sepas con exactitud de cuánto dinero dispones cada mes, en qué se te va y qué es lo primero que necesitas pagar.  

Respeta tus presupuestos y comienza a usar la regla del 50/30/20. Tu vida diaria no tiene que cambiar, solo vas a adquirir nuevos hábitos financieros. Además, en el proceso te permitirás descubrir y aprender cosas nuevas, como parte de este nuevo estilo de vida donde te estás priorizando hoy para tu mañana.  

Cuando hagas del ahorro un hábito te darás cuenta de que sí tiene sus ventajas tener la tranquilidad de que tú mismo contribuyes a una tranquilidad para tu futuro. Y entonces probablemente quieras aprender cómo eficientar tus ahorros para hacer que a mediano y largo plazo generen más dinero para ti, por ejemplo. Y así, cuando menos te des cuenta, la regla del 50/30/20 te habrá ayudado también a mejorar tu estilo de vida y a usar de forma más inteligente tu dinero con la conciencia de que te estás preparando para tu mejor futuro. 

En Profuturo nuestro objetivo es apoyarte para que dispongas de mejores soluciones que te garanticen un mejor balance financiero y que cuentes con una mejor pensión para tu retiro, tu futuro y el de las personas que amas. Conoce nuestros productos y servicios que ofrecemos: con nosotros ahorrar es fácil y sin complicaciones. También puedes escribirnos en nuestras redes sociales de Facebook, Instagram, TikTok, X (Twitter) o LinkedIn.     

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